Somos dueños de lo que sembramos con nuestras inversiones, acciones y manera de actuar. Y adheridos a nuevas realidades mundiales y la necesidad de una verdadera onda verde, poco a poco se han ido promoviendo las comunidades de propietarios ecológicas en pro de un equilibrio que favorezca al ecosistema y por ende, al futuro.
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Comunidades de propietarios ecológicas
Podríamos definirlas no sólo como a las personas sino a todos los seres vivos que forman parte de este complejo natural que llamamos planeta tierra y que funcionan armoniosamente con los sistemas geológicos, biológicos y geológicos de la diversidad de nuestro mundo.
Existen las comunidades de propietarios ecológicas ya que la humanidad depende de los sistemas ecológicos para asegurar su existencia. Todo lo natural o artificial depende de ello y cada quien es propietario o copropietario o inquilino de un bien del cual derivan sustancias, esencias y esfuerzos que pueden favorecer o no al resto del ecosistema.
Las comunidades de propietarios ecológicas se piensan entonces como aquellas donde el trabajo de la industria o comercio como lo residencial garantizan armonía y respeto por el entorno, creando competencias propias para el mejoramiento de la vida cotidiana bajo estatutos comunidad de propietarios evitando los factores que han sido creados por el hombre pero que han resultado dañinos, como los gases de la combustión, uso de radiaciones, el mal depósito de los plásticos y la falta de reciclaje del papel o el gasto inmisericorde de agua y electricidad, entre otros.
Importancia
Paulatinamente veremos que la relevancia de las comunidades de propietarios ecológicas se basarán en el rescate, mejoramiento y pautas estándar aplicables para la defensa del medio ambiente desde el entorno en especial ahora que –al fin- han comenzado a darse cuenta de la vulnerabilidad de los sistemas naturales que pasan a ser víctimas del hombre para luego ser el propio ser humano víctima de sí mismo en un ciclo al cual ya hay que buscarle el final.
El valor de una comunidad
Las necesarias comunidades de propietarios ecológicas poseen su plusvalía en el valor que sus propios residentes le otorguen a la práctica, mejora, originalidad y difusión de los conocimientos que les sean impartidos en el área de la construcción y de las ciencias naturales como un trabajo no paralelo, sino en conjunto para así marcar un hito en el desarrollo sostenible.
Como en toda comunidad, este tipo de propiedades poseen un nivel de organización natural así como el promovido por las leyes y las consideraciones consensuadas entre quienes la habitan, funcionando personas, construcciones y medio ambiente como un ecosistema próspero según la intencionalidad de mejorar que tengan las personas que laboren y vivan como equipo.
Su valor real es que una comunidades de propietarios ecológicas permite el vivir de manera bastante independiente y a su vez colindar todos (seres vivos y edificaciones) en interdependencia. Allí hacen vida tanto productores como consumidores (en la vida humana) y los descomponedores y oxigenantes en la vida natural. Todos terminarán necesitándose y ofreciéndose lo mejor de sí para aumentar la calidad de vida de todos.
Ventajas de las comunidades de propietarios ecológicas
- Conocimientos prácticos.
- Comunicación integral.
- Respeto con el entorno.
- Uso de tecnologías de ahorro que disminuyan el uso de factores contaminantes, como paneles solares, energía eólica, destiladores de agua de lluvia o agua de sal, uso de productos naturales para rescate de la madera, reciclaje al mayor o para la reutilización en modo de vida o arte, entre otros, iluminación LED.
- Uso de ciclo vías, bicicletas, carros a pedal, áreas de sombra.