Las manifestaciones de dióxido de carbono provienen de dos fuentes fundamentales, las naturales y las antropogénicas. Las emisiones de CO2 en el aire actualmente fluctúa cerca de los 387 ppm, con sus respectivas variaciones entre el día y la noche y con bocas de contaminación determinados. La fusión de CO2 en la atmósfera ha ido creciendo desde finales del XIX y su ritmo de crecimiento se apresuró a finales del siglo XX, aunque la tasa anual de crecimiento apenas ha cambiado en los últimos años.
¿Cómo actúan las emisiones de CO2?
Las emisiones de CO2 proceden de cualquier tipo de combustión. A partir de un fuego hasta el motor diésel de un vehículo, la industria, la agricultura, entre otros son los principales focos de emisiones de CO2 en el mundo. Como consecuencia, las temperaturas están cambiando, incrementándose y causando grandes desequilibrios en el ecosistema. De ahí que, las emisiones de CO2 sean los gases con efecto de invernadero más expuestos a nivel global y, si bien, no tienen capacidad para suspender el calor, su condensación es tan fuerte que es el máximo encargado del calentamiento global.
A pesar del avance de la tecnología en todos los ámbitos del planeta, no se ha logrado contrarrestar los incrementos de las emisiones de gases con efecto invernaderos en las grandes ciudades. Tan es así, que ni siquiera con la introducción del Protocolo de Kioto se logro frenar este incremento, más bien las emisiones de dióxido de carbono han seguido creciendo.
En el año 2008, los países con menor desarrollo personificaron más del 50% de las exposiciones de gases mundiales, debido a la fabricación de bienes para los países más ricos.
Según la Agencia Internacional de Energía, las emisiones de dióxido de carbono seguirán en aumento en un 130% para mediados del 2050; y se necesitara una inversión de 45000 millones de dólares para poder reducirla a la mitad y desarrollar un sistema internacional de las tecnologías energéticas.
Emisiones en la actualidad
Debido al aumento de los gases en la atmósfera se presentan las variantes en los cambios climáticos. La utilización del carbón para la generación de electricidad ha crecido en un 21% para el 2017. Por otro lado, el uso de gas natural también se acrecentó en las capitales de ciclo mixto en un 31,8%. No obstante, el incremento aunque parece insignificante, es bastante grande y ello comprende el aumento de las emisiones de CO2 en la atmósfera.
Los principales sectores responsables de las emisiones de CO2 por secciones, son el gasto de energía causada con inflamables fósiles que fue culpable del 76,1% de las emisiones, en segundo lugar están los procesos industriales como la industria química, las cementeras y la metalúrgica, que ocasionaron un 9,6% los gases, y luego los sectores de agricultura y ganadería produjeron el 10,1% mientras que el procedimiento de los residuos ocasiono el 4,2%.
Las emisiones de CO2 ocasionadas por el hombre acostumbran a ser bastante obvias, pues bien, los medios de transporte que emplean derivados del petróleo como automóviles, camiones, y motocicletas que utilizan combustible son los primeros generadores de CO2, luego encontramos las grandes industrias, aunque se considera que los vehículos producen mayor contaminación atmosférica.
Por parte de la naturaleza, el problema se presenta cuando hay incendios forestales y también cuando hay erupciones volcánicas, sobre todo consecuencias acarreadas por los volcanes que erupcionaron hace millones de años, debido a su incidencia en el cambio climático.
Por otro lado hay que mencionar que el aumento de las emisiones de CO2 también es producto de la recuperación económica que han tenido algunos países después de algunas crisis económicas que han ocasionado una gran adhesión a los combustibles fósiles. Todo este incremento de las emisiones de carbono se puede tomar en consideración como el principal motivo para comenzar a plantear estrategias de descarbonización.